¿ME PRESTAS DATOS?
Me dejó absolutamente enamorada la opción de que alguien te pueda prestar megas de sus datos cuando te estés quedando sin ellos. Me lo descubrió una amiga que trabaja en Inditex, la empresa que nos llena de orgullo a los gallegos, y me vi perfectamente reflejada pidiéndole un mega a Mr. Square, que suele ir más holgado en esto de los datos.
Como me ha pasado algunas veces, tenía preparado otro tema para el post de esta semana, pero la novedad del préstamo en los dispositivos me ha girado la cabeza hacia estos elementos pequeños que han pasado a ocupar tanto espacio en casa, poquito a poquito, así como si nada.
Y lo primero que quiero hacer es un homenaje a todos los padres que, como yo, con hijos rondando los veinte años, no sabíamos lo que se nos venía encima y tuvimos que aprender detrás de sus hombros a usar messenger, whatsapp, facebook, twitter y hasta el fugaz snapchat. Vivimos a la vez que ellos el cambio de la era del móvil para recibir llamadas y mensajes a la new age del móvil con ventana y acceso al mundo. Creo que podríamos demandar a alguien por no venir con preaviso y no dar una charla informativa sobre lo que implicaba un móvil con datos.
Y ahora, sabiendo lo que sé, retrasaría mucho la llegada del móvil a sus vidas, porque quiero que lo tengan cuando puedan gestionarlo, cuando sea un instrumento de ayuda que no los convierta en sus esclavos. 7 Pares de Katiuscas, madre bloggera, habla del parking de los dispositivos móviles en casa, un lugar concreto donde tienen que dejarlos en los momentos que en vez de estar al servicio de la familia parece que juegan en el equipo contrario: momentos familiares, ratos de estudio, horas de sueño... De esta forma seguimos fortaleciendo el músculo de la autoridad como padres, también con el pequeño invasor. Y es que cada vez nos encontramos a más padres que nos dicen que no pueden quitarle el móvil a sus hijos. Y el móvil no es algo que venga incluido con el DNI; ellos tienen que saberlo.
Otra reflexión que tuve con mi amiga, la culpable de este post, fue la ingenuidad de algunas madres con respecto a los móviles sin datos. Parece que no son conocedoras de lo acaparadora que es la wifi, pudiendo entrar en tu casa por la cafetería de al lado o por algún vecino cercano.
Estos intrusos vienen para quedarse, así que vamos a darles todo el uso que podamos siempre que estén a nuestro servicio. Recibir a las xx de la mañana un whatsapp de "ya estamos llegando" suena maravilloso y, si como dicen, whatsapp nos va a dar la opción de localizar la ubicación al instante, que voy a deciros: ¡me rechiflaaaaa! Los de mi casa saben que, para estas Navidades, me pedía la especie de reloj que indicaba dónde estaba cada uno de los miembros de la familia en casa de Ronald Wheasley: parece que whatsapp escuchó mis peticiones.
¿Te unes a poner la tecnología al servicio de tu familia? Why not?
Me dejó absolutamente enamorada la opción de que alguien te pueda prestar megas de sus datos cuando te estés quedando sin ellos. Me lo descubrió una amiga que trabaja en Inditex, la empresa que nos llena de orgullo a los gallegos, y me vi perfectamente reflejada pidiéndole un mega a Mr. Square, que suele ir más holgado en esto de los datos.
Como me ha pasado algunas veces, tenía preparado otro tema para el post de esta semana, pero la novedad del préstamo en los dispositivos me ha girado la cabeza hacia estos elementos pequeños que han pasado a ocupar tanto espacio en casa, poquito a poquito, así como si nada.
Y lo primero que quiero hacer es un homenaje a todos los padres que, como yo, con hijos rondando los veinte años, no sabíamos lo que se nos venía encima y tuvimos que aprender detrás de sus hombros a usar messenger, whatsapp, facebook, twitter y hasta el fugaz snapchat. Vivimos a la vez que ellos el cambio de la era del móvil para recibir llamadas y mensajes a la new age del móvil con ventana y acceso al mundo. Creo que podríamos demandar a alguien por no venir con preaviso y no dar una charla informativa sobre lo que implicaba un móvil con datos.
Y ahora, sabiendo lo que sé, retrasaría mucho la llegada del móvil a sus vidas, porque quiero que lo tengan cuando puedan gestionarlo, cuando sea un instrumento de ayuda que no los convierta en sus esclavos. 7 Pares de Katiuscas, madre bloggera, habla del parking de los dispositivos móviles en casa, un lugar concreto donde tienen que dejarlos en los momentos que en vez de estar al servicio de la familia parece que juegan en el equipo contrario: momentos familiares, ratos de estudio, horas de sueño... De esta forma seguimos fortaleciendo el músculo de la autoridad como padres, también con el pequeño invasor. Y es que cada vez nos encontramos a más padres que nos dicen que no pueden quitarle el móvil a sus hijos. Y el móvil no es algo que venga incluido con el DNI; ellos tienen que saberlo.
Otra reflexión que tuve con mi amiga, la culpable de este post, fue la ingenuidad de algunas madres con respecto a los móviles sin datos. Parece que no son conocedoras de lo acaparadora que es la wifi, pudiendo entrar en tu casa por la cafetería de al lado o por algún vecino cercano.
Estos intrusos vienen para quedarse, así que vamos a darles todo el uso que podamos siempre que estén a nuestro servicio. Recibir a las xx de la mañana un whatsapp de "ya estamos llegando" suena maravilloso y, si como dicen, whatsapp nos va a dar la opción de localizar la ubicación al instante, que voy a deciros: ¡me rechiflaaaaa! Los de mi casa saben que, para estas Navidades, me pedía la especie de reloj que indicaba dónde estaba cada uno de los miembros de la familia en casa de Ronald Wheasley: parece que whatsapp escuchó mis peticiones.
¿Te unes a poner la tecnología al servicio de tu familia? Why not?
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