Carta a los Reyes Magos de una madre de doce hijos.

Queridos Reyes Magos:

Cuando hago un examen del nivel de bondad de este año... tengo la sensación de haberme ganado el suspenso. Aún sabiendo que puedo estar en la lista del carbón, voy a hacerme la rubia y pediros un montón de cosas:

1- Quiero un sensor, una app que encienda una luz roja indicando que me concentre en disfrutar ese momento. La intrahistoria de mi vida, ese pequeño instante irrepetible: bañar a los bebés, dar besos para despertar, cocinar escuchando la radio y que se escape media sonrisa, el final de una tarde de verano... Y, de paso, un congelador para conservarlos, no todo el año, ¡el resto de la vida!

2- Quiero más escapadas con Mr. Square. Pero sólo, repito SÓLO, con él. Quiero seguir alucinando todos los días , por el hecho de haber sido yo la elegida para acompañarle en la aventura de su vida. Una vida que, en términos matemáticos, podría ser resumida en: 1 + 1 = 14.

3- Quiero muchos buffets de los viernes, cenas rodeadas de toda la familia y de los que queráis acompañarnos. Ya sabéis: sólo tenéis que confirmar con un whatsapp antes de las 12. Os espero.

4- Quiero un traductor, un traductor para cada uno de mis doce hijos, que les haga entender que la justicia de los padres, si es justa, no es equitativa. A cada uno le exigimos en función de sus talentos. Si diésemos café con leche para todos, sólo conseguiríamos crear intolerantes a la lactosa.

5- Quiero más desayunos con diamantes. Término con el que este año hemos definido a las conversaciones telefónicas con amigas mientras limpias, haces camas, planchas y a veces... desayunas. Acompañada, hasta lo más arduo se hace amable.

6- Quiero una máquina pulidora que saque brillo a los días negros, sabiendo que con el brillo de esos días conseguiré apreciar los infinitos colores diferentes que tienen los días anodinos.

7- Quiero un jarabe (éste es el regalo más importante), no importa si sabe mal, que me aumente la capacidad de hacer felices a todos.

Y, ya para terminar..., y sólo si puede ser, que nunca me falten ideas para las cenas, que mi colada salga inmaculada y bien oliente, que los armarios mantengan más tiempo el orden, y que los cambios de ropa al principio de temporada resulten menos dramáticos... Sí, lo sé, para eso ya me habéis regalado un montón de blogs donde inspirarme: Webos fritos, Cenas para peques, Orden y limpieza, Velocidad cuchara, Netísimmas, Verderón,... Los uso todos los días: gracias.

PD: Espero que a sus majestades no les importe que me ponga en contacto con ustedes otra vez en Junio. En esos días de exámenes me vendría bien escribirles otra carta... Y decirle al Bebé de Belén que en casa tenemos dos cunitas y buena calefacción: que se queden los tres a pasar el invierno y un ratito más.

Y tú, ¿ya le has escrito la carta a los Reyes? Why not?